La mayoría de la gente piensa que mi trabajo se parece al de Cesar Millan, de hecho, y aunque se lo intente explicar, en sus cabezas queda grabada con tinta indeleble esa asociación. En muchas ocasiones, y debido a la dificultad para explicar qué es exactamente lo que hago, directamente me invento otra profesión. Como diría una amiga mía "pinto techos", así me ahorro dar explicaciones cuando ya la persona que me ha preguntado directamente me ha asociado con el programa de televisión (con un poco de suerte con el Millan, si no con algún otro programa más oscuro). Reconozco que sí me despierta cierta envidia dicho showman, más que por la fama y el dinero, por la oportunidad de difusión que le dan los medios y la plataforma de marketing que trabaja con él. Es una pena que tal capacidad de llegar al telespectardor y potencial propietario de perro se pierda en promocionar técnicas obsoletas, pero en fin, ese sería otro debate.
A lo que iba, hace tiempo vi una película maravillosa que describe bastante bien a qué me dedico, e incluso la incomprensión e incredulidad de muchas personas, profesionales incluidos, que no creen que las cosas se puedan hacer de otra manera.
Recomiendo efusivamente ver la película completa (especialmente si trabajas o tienes pensado trabajar con perros o dragones ;) ), Cómo entrenar a tu dragón.
No hay comentarios:
Publicar un comentario